Aarón, de ocho años, falleció la semana pasada en el hospital de Elda (Alicante) sin un diagnóstico tras haber pasado cinco veces en cuatro días por urgencias. La autopsia se conoció el jueves por la noche: peritonitis. Su abuela, quien tenía la patria potestad, denunciaba la semana pasada en un vídeo colgado en diversas redes sociales que, pese a las reiteradas visitas a dos centros médicos y a los fuertes dolores de estómago que presentaba el menor, solo se le había practicado un análisis de orina y se le habían administrado medicamentos para cortarle los vómitos. El caso está en manos de un juez, quien determinará si hay indicios de un delito penal de homicidio u omisión de socorro.
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